La supremacía del isekai: abriendo la puerta de nuestros sueños de viajar a otros mundos
Aventuras, amor y nuevas vidas al alcance de nuestra imaginación

Rimuru de That Time I Got Reincarnated as a Slime te da la bienvenida al mundo de los isekais / © Taiki Kawakami, Fuse, KODANSHA/“Ten-Sura” Project
El isekai es un género al alza, es algo que nadie puede negar a estas alturas. En los últimos años el género ha tomado más fuerza que nunca, amasando grandes cantidades de fans que adoran ver a personajes que podríamos cruzarnos por cualquier calle de nuestra ciudad siendo trasladados a todo tipo de mundos y situaciones inéditas. La fuerza del género es tal, que incluso desde Kadokawa están encantados con cómo triunfa en todo el mundo y están dispuestos a darle mas alas que nunca. Pero ¿qué hace que el género tenga tanto éxito?
Una clave de ello es sin duda lo fácil que puede ser identificarse con algunos personajes. Los protagonistas son, en el fondo, personas de nuestro mundo, agobiadas por una vida infructuosa, por el estrés de la vida moderna, que no tenían un objetivo claro en sus vidas corrientes antes de acabar en otro mundo, ya sea por el ahora tradicional camión, por una invocación buscando héroes, por designios de una diosa caprichosa o cualquier otro motivo que se tercie. Acaban en mundos de fantasía con magia y espadas por doquier o en mundos paralelos extraños rodeados de monstruos, pero todos coinciden en algo: sus vidas han cambiado para siempre.
Azusa, protagonista de I've Been Killing Slimes for 300 Years and Maxed Out My Level / ©Kisetsu Morita-SB Creative Corp./slime300 project
Cambiar de mundo no hace que cambies de personalidad de repente, así que todos los protagonistas de isekais suelen conservar sus recuerdos de su vida pasada o los recuperan poco a poco, usando esos conocimientos de su mundo para, de un modo u otro, sobrevivir en su nuevo mundo... aunque no siempre con los mejores resultados. Pero es la personalidad lo que hace a estos personajes tan especiales. Un héroe nacido en un mundo de fantasía, por ejemplo, será un ser que busca la justicia por encima de todo y tendrá sus valores, pero cuando procedes de un mundo como el nuestro, su personalidad destaca por encima de todas las demás. Ahí tenemos personajes como Subaru, de Re:ZERO -Starting Life in Another World- con sus memes y juegos de palabras, tomándose la vida de una forma que ningún otro personaje de su nuevo mundo lo hace, o a Azusa, de I've Been Killing Slimes for 300 Years and Maxed Out My Level, que tras sufrir un agotamiento laboral extremo que la llevó a la muerte decide vivir con la mayor calma del mundo y alejarse de todo estrés. En cualquier caso, es fácil que nos sintamos identificados con un personaje protagonista de isekai porque es muy probable que refleje cómo habríamos actuado nosotros en su situación o cómo reaccionaríamos a los descubrimientos que hacen del nuevo mundo. Esa facilidad para identificarse con un personaje en un mundo tan desconocido es uno de los puntos fuertes de los isekais.
Pero aunque el isekai parezca algo "de moda" y para algunos en exceso, lo cierto es que la base del isekai siempre ha existido, y no solo en Japón. La idea de un niño o adolescente cambiando de mundo es algo que hemos visto montones de veces en la literatura occidental. ¿Quién no recuerda a Alicia viajando al País de las Maravillas, sorprendida por todo lo que ese mundo de locura le ofrece? ¿Podemos olvidarnos de Peter Pan y sus compañeros, enfrentándose a piratas con la ayuda de unos sencillos niños de Londres? ¿O de esos niños que atravesaron un armario y acabaron en Narnia para ayudar a salvarla?
Noella, una de las chicas de Drug Store in Another World - The Slow Life of a Cheat Pharmacist / (c)KENNOJI/HIFUMI SHOBO, Cheat Pharmacist Project
La idea de escapar a otro mundo y vivir aventuras es muy antigua, algo que todo niño ha querido hacer alguna vez, algo que todos hemos querido hacer alguna vez. Ni siquiera hay que recurrir a literatura de hace décadas para encontrar casos de éxito del "isekai occidental" si tomamos en cuenta la historia de un pequeño niño con una vida desgraciada que atraviesa una pared y acaba en un mundo de magia como es Harry Potter. El isekai no es más que una materialización de los deseos de toda la humanidad de vivir una vida diferente en algún punto de sus vidas, de ser otra persona, de ser alguien importante, tal vez un héroe que salve el mundo...
Los isekais ya eran populares en los animes de hace unas décadas, con ejemplos tan bien conocidos como Inuyasha, con una joven transportada a otro mundo donde la magia, los demonios y los espíritus son el pan de cada día. Fushigi Yuugi es otro claro ejemplo de esto, con una joven viajando a un mundo para convertirse en sacerdotisa, conocer guerreros y proteger algo más valioso de lo que jamás habría concebido en su vida como estudiante japonesa. Las reglas del isekai siempre estuvieron ahí.
En los tiempos que corren la vida es más estresante que nunca, nos enfrentamos a juicios sociales, responsabilidades y complicaciones mayores de las que se vivían hace 30 años, con lo que la sensación de sentir que por un momento podríamos escapar a otro mundo atrae a más personas que nunca, y el género ha evolucionado para adaptarse a todas las personas posibles. No importa si eres un oficinista hastiado del trabajo, un adolescente que sueña con tener su primera novia seria o una mujer de mediana edad en busca del amor verdadero, puesto que si rebuscas un poco entre lo que el isekai te puede ofrecer, seguro que encuentras algo para ti, algún personaje con el que identificarte lo necesario como para atraerte.
Catarina, la encantadora protagonista de My Next Life as a Villainess: All Routes Lead to Doom! / ©SATORU YAMAGUCHI,ICHIJINSHA/"HAMEFURA" Production Committee.
Uno de los isekais que sentó cátedra y plantó la semilla del éxito moderno fue Sword Art Online, una serie que logró aunar muchos de los conceptos populares de la época. Con la realidad virtual cada vez más en auge, su protagonista, Kirito, no necesitaba morir o viajar físicamente a otro mundo, sino que acababa encerrado en un mundo virtual de un videojuego donde tenía que sobrevivir, superar retos imposibles e intentar regresar a su hogar. No solo era un héroe que llevaba una vida interesante en un mundo de espada y fantasía, sino que además había acabado ahí gracias a un videojuego. ¿A qué adolescente o joven adulto le costaría identificarse con él? ¿Quién no ha soñado alguna vez con poder perderse en el mundo de su videojuego favorito por unos instantes? SAO además nos presentaba la premisa de un mundo repleto de personas en esa situación de "isekai virtual forzado", mostrándonos todo tipo de personajes que se habían adaptado de muchas formas diferentes a su nueva vida. No todos necesitaban ser héroes, y había quienes se conformaban con llevar una vida tranquila en el pueblo inicial, sobreviviendo con la esperanza de algún día poder volver a su mundo, e incluso quienes no querían regresar jamás sabiendo que la vida que les esperaba fuera de Aincrad era una vida vacía y aburrida.
Su éxito, los imitadores que surgieron de SAO intentando seguir su estela y la necesidad de llegar a un público más allá del "joven en busca de aventuras", forzaron al isekai a reinventarse poco a poco, y aunque hoy muchas obras compartan la base de "persona que acaba en otro mundo", el enfoque de los mismos puede ser muy diferente. Recuerdas que antes dijimos que la base de todo isekai es en el fondo la fantasía de todo niño? Pues para hacer evolucionar el isekai había que cubrir otro tipo de "fantasías" de todo tipo de público, y eso incluye fantasías de todas las formas y colores.
El elenco de How NOT to Summon a Demon Lord Ω con su protagonista, Diablo, en el centro / ©Yukiya Murasaki,KODANSHA/How NOT to Summon a Demon Lord Ω Production Committee
Uno de los añadidos más populares del isekai moderno es el factor sexual. En un Japón donde las relaciones son cada vez más complicadas por su altísimo ritmo de vida, el sexo pasa a convertirse en una fantasía para muchas personas que simplemente no tienen tiempo para desarrollar relaciones con otras personas, de modo que si sumamos la fantasía erótica al isekai base, surgen series como How NOT to Summon a Demon Lord, donde los protagonistas no son solo héroes, poderosos o gozan de habilidades especiales, sino que además tienen la capacidad de atraer a montones de mujeres (generalmente de exhuberantes curvas) que harán casi cualquier cosa por ellos, incluyendo competir con sus compañeras de grupo por la atención (y el cuerpo serrano) del personaje principal.
Ese tipo de isekais no suelen ser muy atractivos para el público femenino, con lo que también surgieron los isekai-otome, como es el caso de My Next Life as a Villainess: All Routes Lead to Doom!, donde la joven Catarina descubre que está viviendo en el mundo de un videojuego otome que le encantaba en su vida anterior (pausa momentánea: oh, otro videojuego). En estos casos son las jovencitas las que intentan lidiar con su nueva vida y gracias a su personalidad, siempre derivada de su vida anterior, consiguen atraer a montones de personajes a su alrededor que acaban enamorándose perdidamente de ella.
La reencarnada bibliotecaria en niña protagonista de Ascendance of a Bookworm / ©Miya Kazuki,TObooks/Ascendance of a Bookworm Project
Pero ¿y si no se quieren aventuras ni complicaciones con el amor o el sexo? El "isekai relajado" se une a la batalla. Series como Drug Store in Another World - The Slow Life of a Cheat Pharmacist nos presenta a un personaje que decide olvidarse de todo y simplemente llevar una vida relajada y tranquila en su nuevo mundo, en ocasiones aprovechando sus conocimientos de su vida pasada para ayudarle. Ascendance of a Bookworm es otro caso similar, donde pese a que su protagonista era una joven bibliotecaria japonesa, su único objetivo en su nueva vida es poder leer tanto como a ella le gusta, aunque tendrá que conseguir los medios para poder crear sus propios libros en un mundo donde leer es un lujo reservado para unos pocos. Sí, puede haber problemas, amor, misterio... pero son series donde la acción o el erotismo no juegan un papel tan relevante.
Y hay más, muchos más casos de isekais "diferentes" que parecen apuntar a un cierto tipo de público concreto, intentando que esas personas se identifiquen con sus personajes y puedan disfrutar de una obra con la que piensen en más de un momento: "Podría ser yo quien estuviera en ese mundo".
Si bien todo esto ha llevado a la proliferación de obras que se cortan por un patrón muy básico y que a los más curtidos en este mundo, ya sean ávidos consumidores de manga, novelas ligeras o anime, les parecerán repetitivos, no podemos olvidar que todo isekai tiene un público concreto y que toda historia será "la primera" de ese tipo para alguna persona en alguna parte.
Naofumi disfruta de la pesca en The Rising of the Shield Hero / ©2019 Aneko Yusagi/KADOKAWA/Shield Hero production committee
En cualquier caso, aunque el isekai nos ha dejado una buena cantidad de historias con personajes y situaciones muy similares, también ha logrado darnos grandes obras modernas que han triunfado mucho en todo el mundo como puedan ser That Time I Got Reincarnated as a Slime, The Rising of the Shield Hero o I'm a Spider, So What?. Todas ellas no solo gracias a crear un mundo de fantasía creíble y realista que se rige por sus propias normas y deja atrás todo lo que los personajes conocían en su mundo original, sino principalmente a haber logrado forjar personajes interesantes cuya personalidad entremezcla la de cualquier persona que podría existir en el mundo real con la de aquellos que han de adaptarse a vivir en un mundo que les es completamente ajeno.
Y es que el isekai es eso, una representación de las fantasías que todos tenemos, de esos deseos que todos tenemos o tuvimos en algún momento de nuestras vidas, un ejemplo vivo y en constante evolución de que el ser humano puede permitirse, y de hecho necesita, darse el lujo de soñar con otra vida, de que es capaz de adaptarse a cualquier situación para sobrevivir. ¿Y no es en el fondo lo que ya hacemos día a día, sobrevivir como podemos a los embites de la vida diaria?
Así que tanto si eres fan del género como si eres de los están ya hastiados de él, solo podemos decirte una cosa: permítete soñar y viajar a otros mundos aunque sea durante los escasos 24 minutos que dura un episodio de anime, pues soñar es una de las cosas que nos hace humanos y nos ayuda a enfrentarnos a nuestros momentos más duros. Te lo mereces.
Y recuerda, si quieres ver algún isekai tenemos esta temporada algunos en emisión en nuestro catálogo como The World's Finest Assassin Gets Reincarnated in Another World as an Aristocrat o The Fruit of Evolution: Before I Knew It, My Life Had It Made.